Por fin estamos en agosto... el momento idóneo para olvidarnos de todo, de desconectar y de perdernos por el Mediterráneo y sus increíbles islas. Islas como Rodas, una isla griega a la que bien podríamos escaparnos ahora mismo para alojarnos en Casa Cook Rhodes.
Rodas es la isla más grande del archipiélago del Dodecaneso. Con un pasado lleno de historia, y de hechos mitológicos, Rodas está lleno de lugares por descubrir, y sin duda este hotel del que os queremos hablar hoy es un buen punto de partida.
Diseñado por Annabell Kutucu y Michael Schickinger, este encantador hotel boutique tiene 90 habitaciones, y su interiorismo está inspirado en los viajes alrededor del mundo.
Así, partiendo de esta premisa, este hotel situado muy cerquita del mar Egeo mezcla con habilidad la arquitectura tradicional de las islas griegas con un estilo cálido y nómada.
El interior del hotel invita a la paz y al relax, con multitud de piezas de época y objetos de artesanía hechos a mano que crean un ambiente muy especial y lleno de color, gracias a la mezcla de estos elementos con las paredes de piedra y el tan característico blanco.
Las amplias habitaciones del hotel, con distintos espacios y ambientes, son muy luminosas para aprovechar la arrebatadora luz de esta zona del Egeo, y están repletas de paja trenzada, pufs, sillas retro de alambre y algodón natural.
El comedor, además del ambiente étnico que puede respirarse en el resto del hotel, tiene también un precioso detalle tropical con este colorido y refrescante mural sobre los azulejos de una de las paredes.
Un hotel con un ambiente fresco y confortable al que no nos importaría teletransportarnos en este mismo instante, ¿verdad?
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